El yoga se ha convertido en una práctica muy popular en las últimas décadas. La práctica, que probablemente se origina en la antigua India, ahora se practica en todo el mundo y de diferentes formas. La palabra yoga originalmente proviene de la palabra sánscrita ‘yuj’, que significa «yugo». Aunque el significado se ha descrito de muchas maneras diferentes, la forma más común de explicar el significado de la palabra es el objetivo de unir la mente. Cuerpo y espíritu.
Como se describe a menudo, el objetivo del yoga es lograr un equilibrio psicológico, emocional, espiritual y físico. Todos estos objetivos son increíblemente valiosos en nuestra vida diaria, que a menudo están llenos de estrés, distracciones e influencias malsanas. Especialmente en Occidente, muchas personas vivimos una vida apresurada y, por lo tanto, necesitamos desesperadamente formas de recuperar el equilibrio que a menudo se enfrenta a grandes desafíos.
Probablemente esta sea la razón por la que el yoga se hizo tan increíblemente popular en Occidente; El yoga contribuye a ese equilibrio. A través de una práctica regular de yoga, la gente se siente más relajada, más sana, más segura y más capaz de enfrentar los desafíos en general. Además de eso, las personas que practican yoga regularmente tienden a ser menos vulnerables a las enfermedades.
Analizamos los efectos principales del yoga en el área de trabajo e hicimos una lista de cuatro beneficios del yoga en el desempeño laboral y la felicidad en el trabajo
Reducción de los niveles de estrés.
El estrés es una de las principales amenazas para la fuerza laboral. Los empleadores, los empleados y las personas que trabajan por cuenta propia trabajan con esto, y los efectos del estrés pueden ser enormes. El estrés disminuye la productividad y, por lo tanto, simplemente cuesta tiempo y dinero, pero también suele ocasionar problemas físicos, que pueden ser difíciles de tratar.
El yoga es una excelente forma de reducir el estrés de muchas maneras: simplemente aprendes a relajar tu cuerpo y a tomar conciencia de tu respiración mediante ejercicios de respiración o prácticas de pranayama. Cuando estamos bajo estrés, a menudo respiramos rápido, sin darnos cuenta. Aprender a ser conscientes de esto y cambiarlo cuando sea necesario, puede reducir nuestros niveles de estrés enormemente. El aspecto físico del yoga, las asanas o posturas de yoga, liberan energía y, cuando se presentan desafíos, a veces, pueden enseñarnos a enfrentarnos a ellos y al estrés. Saber cómo enfrentar los desafíos en la colchoneta, nos enseña mucho sobre cómo enfrentarlos en el mundo exterior también.
¿Sabías que el yoga incluso puede ser beneficioso para tu cerebro? Cuando se practica yoga con regularidad, tanto nuestra corteza somatosensorial (el mapa mental y sensacional del cuerpo) como el hipocampo (responsables del manejo del estrés y la ansiedad) crecen.
Además, el yoga estimula el sistema nervioso parasinfático. Tiene un efecto calmante y nos ayuda a lidiar con los eventos estresantes y a recuperarnos del shock.
Incremento de la positividad y felicidad.
Lo último que quieres en tu vida diaria es irritación y tristeza. Es comúnmente conocido que la felicidad trae productividad, creatividad y ayuda. Además, principalmente para los trabajos mas sociales, la felicidad y la positividad simplemente nos hacen más exitosos en el trabajo.
La mayoría de las personas que ya han asistido a una clase de yoga, saben el sentimiento casi eufórico que podemos tener después de una buena clase. Te sientes energizado, en forma y relajado al mismo tiempo.
Este sentimiento puede tener diferentes razones. En primer lugar uno muy simple; estamos orgullosos de nosotros mismos por haberlo hecho en nuestra colchoneta. Nos sentimos bien por el hecho de que nos tomamos tiempo para nosotros mismos y trabajamos en nuestra salud. Y, simplemente, disfrutamos de la clase.
En segundo lugar, las personas sanas son más felices.
«Cuando nos sentimos fuertes y flexibles, simplemente tenemos menos de qué preocuparnos y sentirnos mejor en nuestros cuerpos»
En tercer lugar, la felicidad que sentimos por las prácticas regulares de yoga también puede tener una razón neurológica. Aparte de los efectos relacionados con el estrés como se describió anteriormente, los investigadores han encontrado que los yoguis tienen un nivel más alto de GABA en su cerebro. Se ha encontrado que el aumento de los niveles de GABA está relacionado con un mejor estado de ánimo y disminución de la ansiedad.
Además del GABA, se ha descubierto que el yoga y más específicamente la meditación aumentan los niveles de serotonina y oxitocina. Todos estos productos químicos son responsables de un buen estado de ánimo y una disminución de los niveles de estrés y ansiedad.
Mejora de la postura y fuerza física.
Especialmente para aquellos con trabajos de oficina, el dolor en el cuerpo es un problema común. Estar sentado en la misma posición todo el día puede causar muchas lesiones, con el dolor en la parte inferior de la espalda como el más común, y muchas lesiones relacionadas con los brazos, el cuello y las manos. Aunque se puede hacer mucho tenindo un escritorio y una silla de trabajo perfectos, sentarse en la misma posición largas jornada es una gran presión para nuestro cuerpo.
«Seamos honestos, cuando estás sufriendo, no eres feliz ni productivo»
Especialmente las asanas, las posturas físicas del yoga, mejoran significativamente nuestra postura y salud física. Las posturas muy comunes que se utilizan en los diferentes tipos de yoga para aliviar el dolor de espalda fácilmente son, por ejemplo, «postura del niño», «perro boca abajo», «movimientos gato-vaca» y ciertos giros.
Para brazos y hombros, ciertos estiramientos de manos y hombros y, por ejemplo, la postura de «águila» proporcionan alivio inmediato. Aparte de esto, practicar yoga nos hace flexibles, fuertes y, por lo tanto, previene lesiones adicionales de manera significativa.
Mejora de la concentración y el enfoque.
Un último, pero no menos importante de los beneficios del yoga en nuestro desempeño y felicidad en el trabajo, es una mejor concentración y enfoque. Cuando trabajamos concentrados y enfocados, simplemente hacemos más trabajo. Esto ahorra tiempo y dinero, y simplemente nos hace sentir mejor con nosotros mismos.
Aunque hay muchas prácticas y ejercicios disponibles para mejorar la concentración, el yoga puede ser el más antiguo.
El yoga mejora la concentración y el enfoque. Para empezar, al disminuir el estrés y el dolor, las distracciones más comunes ya se eliminan de nuestra mente. Esto simplemente hace que la concentración sea más fácil.
Además, los ejercicios de pranayama (respiración) y la meditación enseñan a los yoguis a centrarse en algo específicamente y filtrar las distracciones que no son relevantes para ellos en ese momento.
Los estudios han demostrado que las personas que practican yoga tienen un enfoque significativamente mejor. Incluso en comparación con las personas que realizan otras formas de ejercicio. Las razones de esta diferencia no están completamente claras, pero se ha sugerido que la autoconciencia a través de la meditación y la reducción de la ansiedad y el estrés son las principales.
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